CARTA HOMENAJE A LAS MUJERES, ESOS SERES
INCREIBLES QUE ESTÁN EN NUESTRAS VIDAS……
Decidieron un día que nosotros tal vez sin
muchas certezas, seríamos sus hijos, luego ellas en el camino de sus propias
vidas, con sus miedos y sus esperanzas nos cuidaron, postergando sueños, metas
profesionales o incluso haciéndolas al mismo tiempo. Nos enseñaron a caminar, a
alimentarnos, a sonreír, las primeras palabras, las primeras reacciones. Se
emocionaron a cada instante y a cada paso viéndonos crecer, esas fueron
nuestras madres, MUJERES, valientes,
orgullosas y decididas a cuidar su más precioso regalo (sus hijos).
Fuimos reconociendo a otras con el tiempo,
las que nos hicieron conocer y descubrir que pasaba fuera de la protección de mamá,
esas que nos recibirán día a día con un beso, o con un caramelo, o con una gran
sonrisa, creyendo que podían contribuir a nuestro desarrollo y crecimiento.
Esas fueron nuestras maestras, MUJERES,
con una entrega y una dedicación difícil de igualar, nadie puede dejar de
recordar a alguna maestra en su vida, ese guardapolvo blanco y perfumado que en
un abrazo contenía nuestras lágrimas y nos daba una asombrosa seguridad, la
maestra, la seño hoy ,MUJERES,
llenas de ganas , llenas de esperanza y amor por enseñar.
Con el tiempo llegamos a conocer otro grupo
de MUJERES, las tías, las abuelas,
las primas, las hermanas, las madrinas, las primeras novias. MUJERES llenas de entusiasmo y de
coraje, grandes compinches, corajudas, que creyeron en nosotros y apostaban
cada una en su postura la tarea de contenernos y de acompañarnos en la vida y
porque no en soñar una vida juntos. Seguimos descubriéndolas, y llegaron otras
mujeres a nuestras vidas, las profesionales, que charlaron y trataron de
acercarse a nuestras vidas, profesoras, abogadas, odontólogas, psicólogas,
médicas. Todas con sus reacciones y sus sentimientos y en muchos casos con la
palabra justa y sanadora que nos permitió entender y superar infinitos dolores,
dudas o problemas, MUJERES.
Después decidimos por una, la que vemos y
amamos a diario, la que nos escucha y nos entiende o al menos intenta hacerlo
cada día. Esa que un día también eligió llegar a nuestras vidas para quedarse,
esa que el domingo nos despierta y nos sorprende con un mate y un beso. Esa que
vela por las noches cuando tenemos fiebre o nos alcanza un té caliente cuando
llegamos de trabajar y nos escucha siempre, aunque sepa de antemano que vamos a
decir o contar. Esa que pasan los años y cada día nos recibe y nos defiende
ante el mundo, esa que sufre cuando miramos a otras y con bronca reclama lo que
eligió y nos devuelve a la realidad, esa que un día también va a cuidar a
nuestros hijos como mamá, esa a la que le gritamos cuando no podemos o nos
animamos a descargarnos con los verdaderos responsables de nuestras angustias y
trata de tranquilizarnos y viene ese “tranquilo
gordo que ya va a pasar, sentate y contame “ y viene el mate y el beso
sanador, o la tostada con manteca y dulce de leche, o la sonrisa cómplice , o
la mirada que nos calma, o el abrazo sincero, esas son las esposas o novias, MUJERES. Seres maravillosos, valientes,
melancólicas, celosas, temperamentales, eróticas, compañeras, compinches,
humanas, amigas, a todas ellas FELIZ DÍA …GRACIAS SIEMPRE POR ESTAR A NUESTRO
LADO. Con toda mi admiración y respeto las saludo en su día.
VALENTÍN
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